La voz de la mujer: diacronía, tragedia y poesía

8.3.17

Hombres necios que acusáis, de Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695)
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.

Si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal?

Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.

Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
al niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.

Queréis con presunción necia
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.

¿Qué humor puede ser más raro
que el que, falto de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?

Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.

Opinión ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata,
y si os admite, es liviana.

Siempre tan necios andáis
que con desigual nivel
a una culpáis por cruel
y a otra por fácil culpáis.
¿Pues cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende
y la que es fácil enfada?

Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.

Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.

¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada:
la que cae de rogada
o el que ruega de caído?

¿O cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga
o el que paga por pecar?

¿Pues para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.

Dejad de solicitar
y después con más razón
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.

Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo.

Parlen les dones, de Montserrat Abelló (1918-2014)
Parlen les dones,
la seva poesia
tendra i forta.
Ben pocs s’aturen
a escoltar aquestes veus,
que, trasbalsades,
un nou llenguatge diuen
nascut al fons dels segles.

Still I rise, de Maya Angelou (1924-2004)
You may write me down in history
With your bitter, twisted lies,
You may trod me in the very dirt
But still, like dust, I’ll rise.

Does my sassiness upset you?
Why are you beset with gloom?
‘Cause I walk like I’ve got oil wells
Pumping in my living room.

Just like moons and like suns,
With the certainty of tides,
Just like hopes springing high,
Still I’ll rise.

Did you want to see me broken?
Bowed head and lowered eyes?
Shoulders falling down like teardrops,
Weakened by my soulful cries?
Does my haughtiness offend you?
Don’t you take it awful hard
‘Cause I laugh like I’ve got gold mines
Diggin’ in my own backyard.

You may shoot me with your words,
You may cut me with your eyes,
You may kill me with your hatefulness,
But still, like air, I’ll rise.
Does my sexiness upset you?
Does it come as a surprise
That I dance like I’ve got diamonds
At the meeting of my thighs?

Out of the huts of history’s shame
I rise
Up from a past that’s rooted in pain
I rise
I’m a black ocean, leaping and wide,
Welling and swelling I bear in the tide.

Leaving behind nights of terror and fear
I rise
Into a daybreak that’s wondrously clear
I rise
Bringing the gifts that my ancestors gave,
I am the dream and the hope of the slave.
I rise
I rise
I rise.


Que la voz de la mujer nunca se extinga y siga denunciando el yugo patriarcal, y que ojalá llegue el día en que el 8 de marzo se celebre para conmemorar la emancipación femenina, tan anhelada y disputada y, quizá, al fin conseguida.

Adolesciendo

19.2.17

Sóc jo mateixa quan esclata
la força adolescent.
(Clementina Alderiu)

tendrás que aprender a leer silencios
y a palpar las esquinas hirientes de mi cuerpo,
invisible,
áspero,
etéreo,
intangible.

tendrás que esperar a que me broten las palabras
y adivinar cada figura retórica de mis labios,
herméticos,
cálidos,
discretos,
sintéticos.

tendrás que robarle paciencia a la luna
y sumergir tus dedos en la maraña que es mi mente,
espesa,
enrevesada,
atenta,
dispersa.

Londres; enero agónico; 2017

17 y/o manifesto

3.1.17

being yourself and growing up into the person you want to become is going to hurt a bunch of people. but maybe it's for the best. maybe you owe it to yourself

it hasn't happened just yet but eventually you'll learn to love every hair, every pimple, every stretch mark, every pound and every cell in your body

change is painful but it's also necessary. it will stop stinging and hurting one day

people don't love the same way you do. you need to learn that just because their love is expressed in a language you still don't really understand, it doesn't mean the love is not there

time doesn't exist, but clocks do. try to seize every second the clock ticks

also remember that it's completely legitimate for you to waste a little time and to stay home crying, or worrying too much, or panicking, or overthinking

it's okay to be angry. you've been angry for a while now and you'll still be for quite a big amount of time

slowly you'll grow your own self-esteem so that you don't take every bit of attention the others grant you as an essential requisite for your survival

there are several rare, amazing people in this world and you've already encountered a few of them. please don't ever miss the change of exchanging some words or a smile or the mutual awareness that you both exist in your own particular ways. grasp them. internalize them. love them and let them love you. and, when the time comes, say goodbye and let them go


Podéis ver lo que escribí cuando mis dieciséis años se extinguían y estaba en vísperas de los diecisiete aquí.

Ah, y sí, este es otro de los innumerables intentos de retomar el blog y de ser constante en ello. A ver si este 2017 lo consigo.

Journal: primavera significa tragedia (2016)

25.8.16

27 de febrero · intususcepción (n. f.): modo de crecer los seres orgánicos por los elementos que asimilan interiormente, a diferencia de los inorgánicos, que sólo crecen por yuxtaposición

Es curioso cómo un concepto tan técnico puede aplicarse con tanta precisión a lo metafísico de mi proceso de relación y crecimiento con la realidad. Observo y vivisecciono todo aquello que veo y recuerdo. Condenso a los demás dentro de mi propia forma de ser. Fusiono retazos de los demás en mí. (...) Pero hace tiempo ya que dejé de distinguir entre sangrar y escribir.

29 de febrero · F. habló de la guerra civil, de la represión y de Federico García Lorca. Mientras hablaba de él, sus ojos se enrojecieron. Se emocionó. Y yo me quedé sin palabras.

4 de marzo · (...) me dijo que eso era poesía pura. Acabó de leer y volvió a elogiar mi forma de escribir. G. sugirió aplaudir a causa de ello. Y lo hicieron. M. y otros me miraron. Sonreí. Me morí de vergüenza. Pero me gustó. (...) Fue una clase bonita y trágica. Como la historia. Como la poesía.

18 de marzo · Nos despedimos sin decir adiós. A veces somos (o soy) sólo un oxímoron.

28 de marzo · Habló de príncipes azules que siempre engañan, según confirmó por experiencia propia, de nosotros, las nuevas generaciones, y la porquería de país que nos legan, de su primera novia. (...) Me gusta cuando habla porque me mira a los ojos.

9 de mayo ·  (...) admiro a quien sepa regarse a sí mismo, a quien no viva regido y dominado por la sed hacia el agua ajena. admiro a quien sepa conrear su existencia sin pretender que sean los demás quienes estimulen el jardín que llevan dentro.

Quiero que seamos una

19.8.16

Quiero que seamos una. Que seamos la pobre y la rica. Que seamos la que estudia porque quiere y la que estudia aunque no quiere. La que no puede permitirse una carrera y la que trabaja desde los dieciséis para alimentar a su familia.

Que seamos la que nació sin vagina, sin pechos, sin regla. Que seamos la que se enamora de hombres, o de mujeres, o de los dos, o de ninguno, o de otros. Que seamos la que se mueve en silla de ruedas, la que no puede oír, la que no puede ver, la que no puede hablar. La que lidia con enfermedades mentales y con enfermedades físicas. La que es tímida en exceso y la que es demasiado extrovertida.

Quiero que seamos la que tiene tres años y aún no conoce la vida; la que tiene once y empieza a descubrir el universo; la que tiene veintiuno y está algo perdida; la que tiene cuarenta y dos y ya no es tan joven; la que tiene ochenta y cinco y comienza a acabarse.

Quiero que seamos la que decide depilar todos los pelos de su cuerpo, o los de algunas secciones, o los de ninguna. Que seamos la que viste como aquello a lo que llaman marimacho, o pija, o poco femenina, o puta. Que seamos la que es alta o baja o gorda o delgada. La que lleva el pelo corto o el pelo largo. La que tiene la piel oscura como la tierra húmeda o clara como el blanco de las nubes.

Quiero que seamos la que cree en un dios, o en varios, o en ninguno. Que seamos la que enseña en un aula, la que cobra en un bar, la que investiga en un laboratorio, la que limpia casas ajenas, la que hace cola en el paro. Quiero que seamos la que sueña con un bebé y la que jamás se planteará ser madre.

Quiero que seamos la que está por nacer y no conoce el mundo y la que ya está aquí desde hace tiempo y aspira a cambios y revolución. Quiero que seamos aquellas a quienes no conocemos, aquellas a quienes odiamos, a quienes admiramos y a quienes hablamos.

Quiero que seamos la que grita y lucha por sus derechos y la que siente impotencia por no saber hacerlo. Quiero que seamos la que disfruta de su libertad merecida y la que todavía no la ha conseguido.

Quiero que seamos una y quiero que seamos todas. Quiero que no se pierda ninguna, ni las que iniciaron la batalla y con ella murieron ni las que a día de hoy siguen combatiendo.



La eclosión de la polilla

27.6.16

Cuenta un silencio que hubo
muerte y primavera
y espejos rotos que reflejaban
la percepción ajena

en que viví atrapada.

Enseño el ombligo porque hay cicatrices
más difíciles de mostrar.
Es más sencillo quitarse la ropa
que descorrer el telón interno,
que exhibir raíces y desnudarse por dentro.

Los vestigios de aquello que fue nuestro
se solapan entre páginas rotas.
Soy un ávido lector de letras que no entiendo,
de ti, de los versos que eres
y de metáforas que no comprendo.

El vértigo a mis pies
y el ímpetu a flor de piel.
Bajo una bóveda de plomo me detengo y pienso
que no es tanto el infierno que me rodea
sino los demonios que llevo dentro.

El valor de dejarme ver,
la disciplina de dejarte entrar.
Ojalá no perderme a mí
mientras intento encontrarte a ti.
Ya no distingo entre sangrar y escribir.

Con la bilis negra y la sangre seca pienso
que es curioso a dónde nos arrastra el tiempo.
El papel se tiñe y del cristal se borra
de mi primer adiós

y tu último aliento.

***

poema gestado a lo largo de los últimos meses y confeccionado entre el 21 y el 23 de junio
quizá, prestando especial atención, puedas reconocerte en alguna metáfora o recordar el día que compartimos un verso